Hablamos de doble excepcionalidad cuando encontramos una alta dotación y una necesidad de apoyo en el aprendizaje de los niños de manera simultánea, como puede ser el caso de niños diagnosticados con Trastorno del Espectro Autista (TEA) (grado 1) y la alta dotación. Algunos niños con alta dotación pueden mostrar un comportamiento similar al de niños con TEA grado 1 (hipersensibilidad a los sonidos, dificultad en las relaciones sociales, dificultad en la comprensión del lenguaje no verbal), por lo que aprender a diferenciarlos puede ser todo un reto incluso para los profesionales.
A pesar de esta dificultad, algunas características pueden ayudarnos a distinguir a estos chicos: su capacidad para adoptar las perspectivas de los demás, su sentido del humor, su expresión de sentimientos, su explicación y comprensión de las situaciones socialmente complejas y su respuesta ante el cambio inesperado de la rutina (Davidson Institute, 2000).
Incluso con estas características, no podemos olvidar tres puntos importantes: 1) estos chicos se encuentran dentro del espectro, por lo que estas características pueden variar entre los niños; 2) son los especialistas quienes exclusivamente ofrecen un diagnóstico; y 3) debemos enfocarnos mayoritariamente en sus fortalezas y motivaciones, ayudándoles a crecer.
Cómo docentes, ¿Qué podemos hacer?
-Dedicar un tiempo al principio de cada año escolar a ayudar a todos los alumnos a apreciar y apoyar las diferencias individuales.
-Asegurarnos de que entienden la idea general de lo que queremos enseñar: utilizar videos antes y después de la unidad, trabajar organizadores gráficos.
-Utilizar juegos con mucho movimiento: de equipo en los que los niños tengan que caminar a diferentes zonas de la sala para indicar una respuesta, pedir a los alumnos que se pongan de pie o salten para indicar sus respuestas a las preguntas.
-En la medida de lo posible, permitir a los alumnos avanzar en los nuevos contenidos a un ritmo más rápido y utilizar parte del tiempo restante para trabajar en proyectos en sus áreas de interés.
Y como padres, ¿Qué podemos hacer para ayudar a los niños con doble excepcionalidad?
-Enseñar planificación, estrategias de organización y gestión del tiempo.
-Realizar role-plays (imitaciones) para situaciones de habilidades sociales.
-Encontrar actividades fuera de la escuela para aprovechar los puntos fuertes, aumentar la confianza y encontrar nuevos amigos. Idealmente, actividades que sean del gusto del niño.
-La comunicación eficaz es importante: podemos fomentar esta habilidad escuchando y observando activamente a los chicos. Esperar a que hablen y dándoles tiempo para pensar.
-Utilizar tecnologías que aumenten su éxito en el aprendizaje.
Si bien la crianza y la enseñanza de niños con doble excepcionalidad es todo un desafío. Pueden ser necesarios varios intentos para encontrar planes que funcionen y estos cambiarán, pero cualquier esfuerzo que realicemos contribuirá a crear ambientes de crecimientos óptimos para estos niños.
Por Andrea Alvarado Gutiérrez
Licenciada en Psicología.
Master en Intervención Educativa y Psicológica de la Universidad de Navarra.
MCD Saint Peter High School. Correo; aalvaradog@sps.ed.cr
Bibliografía
Davidson Institute. (2000, 16 octubre). Gifted children with Asperger’s Syndrome. https://www.davidsongifted.org/gifted-blog/gifted-children-with-aspergers-syndrome/
MADA. (2019). Guide to Support High Functioning and Gifted Children with Autism in Education. https://www.mada.org.qa/wp-content/uploads/2019/10/MADA_HFG-ENGLISH.pdf